Con la llegada del calor y el aumento en el precio de los postres tradicionales, el helado casero se transformó en una de las tendencias culinarias más fuertes del verano. En redes sociales, blogs gastronómicos y canales de cocina, se multiplican las recetas que prometen cremosidad sin conservantes, con ingredientes básicos y sin necesidad de maquinaria profesional.
El auge de las recetas caseras
A diferencia de lo que sucede con otros postres, el helado casero no requiere grandes habilidades de repostería. Con pocos elementos -un bowl, una batidora y una heladera común- es posible replicar versiones muy cercanas a las de una heladería artesanal.
Para quienes buscan ahorrar, controlar los ingredientes o simplemente probar sabores personalizados, esta alternativa gana cada vez más adeptos.
La receta base del helado casero
Existen distintas técnicas, pero la preparación más práctica y difundida entre aficionados tiene tres ingredientes esenciales:
Crema de leche
Leche condensada
Esencia o saborizante (vainilla, cacao, frutas procesadas, dulce de leche, café, etc.)
Esta fórmula, conocida como “base de helado sin máquina”, permite obtener una textura aireada y cremosa sin necesidad de batir durante el frizado.
Cómo hacerlo paso a paso
Batir la crema de leche hasta que esté firme, con textura de chantilly.
Incorporar la leche condensada en forma envolvente, para evitar que la mezcla pierda aire.
Agregar el sabor elegido: vainilla, cacao tamizado, puré de frutillas, dulce de leche repostero o lo que se quiera experimentar.
Colocar en un recipiente hermético y llevar al freezer durante al menos 6 horas.
Retirar 10 minutos antes de servir, para lograr una textura más suave.
El resultado es un helado con cuerpo, estable y dulce, ideal para personalizar con chips de chocolate, trozos de fruta, salsa de caramelo o frutos secos.
Los sabores más fáciles para empezar
Vainilla clásica, que funciona como base para otras combinaciones.
Chocolate o cacao, que solo requiere sumar polvo amargo y, si se desea, chips.
Frutas de estación, especialmente frutilla, durazno y mango.
Dulce de leche, uno de los preferidos de los argentinos y también uno de los más simples.
Consejos para un mejor resultado
Usar crema de leche bien fría facilita el montado.
Si se agregan frutas, es clave procesarlas sin agua para evitar cristales de hielo.
Los recipientes de metal enfrían más rápido que los de plástico.
Para un toque profesional, se puede sumar una cucharadita de glucosa o miel, que ayuda a mantener la textura suave.
Todos los derechos reservados a catamarcaya.com - catamarcaya.com.ar |
Contacto directo: catamarcaya@yahoo.com.ar |
Sms directo: 383 154 377769 |
Diseñado por: Martin Lobato Carbel |