Hay algo en la primavera que invita a brillar distinto. Los días se alargan, los looks se alivianan y los accesorios pasan a ser protagonistas. Esta vez, las joyas no vienen a acompañar el outfit, sino que lo definen. Desde los collares de perlas con aire moderno hasta los aros que imitan formas orgánicas y naturales, las propuestas se adaptan a múltiples estilos.
Joyas primaverales
La primera gran tendencia para el cuello son las perlas reinventadas. Según expertos, esta primavera-verano 2025/26 las colecciones traen gargantillas y collares con perlas de distintos tamaños o combinadas con metales y cuentas de color. El resultado es un accesorio que conserva su elegancia clásica, pero suma frescura y un toque artesanal que lo vuelve actual.

En las muñecas, el foco está en los brazaletes y pulseras con presencia. Las versiones anchas, metálicas o que mezclan oro y plata se imponen como favoritas. Se pueden usar solas o apiladas, y funcionan tanto para looks de día como de noche. Lo importante es que se vean, que ocupen espacio y que acompañen el movimiento de las manos con brillo propio.

Los aros de inspiración natural completan el trío de tendencias. Caracoles, formas onduladas y acabados irregulares aparecen como detalles clave de la temporada. Son piezas que se sienten casi escultóricas, ideales para darle un aire veraniego y sofisticado a cualquier conjunto.

Y si algo une a todas estas tendencias es la libertad que se encuentra al mezclar metales, texturas y estilos. Plata con oro, brillo con opaco, piezas XL con otras más delicadas. Esta primavera, la joya deja de ser complemento para convertirse en el gesto que define toda la actitud del look.
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